Dentro de la coyuntura actual, es necesario hablar sobre el Diseño Industrial + Covid-19 y las visiones que podemos tener para enfrentar este tipo de crisis desde nuestra profesión, esta historia que la cuenta Lucho, comienza en momentos en los que una pandemia se percibía imposible.
Hace unos meses en la cervecería del barrio, en la que intentamos terminar siempre la semana con conversaciones de sobremesa, estábamos mi amiga Tatiana, que es abogada y Paul. Divagábamos sobre la distopía de enfrentar el Apocalipsis zombie, y sobre todo, ¿Qué tan útiles seríamos los tres en un mundo postapocalíptico?. Sí, ese escenario de Hollywood en la que los muertos vuelven a la vida y cada uno se convierte en un depredador ansioso de sangre, el resultado: los tres salíamos perdiendo. Tener que vivir día tras día demostrando aptitudes físicas de lucha y matanza no iba con ninguno de nosotros. Tampoco en la de pelear con robots asesinos y guiar a la humanidad como si corriera sangre de John Connor por nuestra venas latinas. Y aunque ahora esos escenarios son aún lejanos, el riesgo que el COVID-19 ha venido a replantearnos sobre lo que realmente es importante y como podríamos colaborar desde nuestro espacio profesional. Sobre todo Pastv y yo, que venimos del mundo del diseño de productos, diseño industrial y que queremos subirnos al fenómeno “Maker”.
El COVID-19 vino a golpear la civilización humana. Según las estadísticas un 3% de los enfermos va requerir asistencia en UCI. Su alto nivel de contagio podría hacer que todo el sistema hospitalario de un país colapse. Es decir, que por recibir pacientes con COVID-19, no se puedan atender otras enfermedades o accidentes, por lo tanto; caos absoluto. El caos de las películas del que tanto queremos huir. De lo que tenemos certeza es que la humanidad nunca ha tenido tantas herramientas a favor. Empezando por la información actualizada minuto a minuto de los contagios en el mundo, país por país:
Mapamundi Arcgis, Covid-19
Diseño Industrial y Covid-19
También hoy por hoy contamos con los espacios, máquinas, impresoras 3D, herramientas para desarrollar casi cualquier cosa y también gracias a las redes sociales de todo tipo, la posibilidad de colaboración conjunta entre varias disciplinas. Pero ¿qué se puede hacer desde el Diseño Industrial? La respuesta es bastante fácil y la tenemos debajo de nuestras narices, y es: lo que se sabe hacer, es decir objetos.
Y aunque suene redundante lo que hacemos los diseñadores industriales son, objetos cotidianos de cualquier complejidad. En medio de la cuarentena encontramos un caso de esas colaboraciones, que empezó por Twitter, con el hashtag #CheapVentilators y la cuenta @AIRE_Covid19 donde se han unido y comenzado a trabajar neumólogos, internistas, enfermeros, diseñadores, ingenieros, mecánicos, etc. con el fin de desarrollar sistemas de ventilación mecánica en “open source” o código abierto. Estos equipos podría asistir y salvar vidas cuando el sistema hospitalario empiece a colapsar en capacidad. La idea que mueve a toda esta gente es que se puedan desarrollar y hacer muchos de estos productos en la mayoría de espacios o laboratorios de fabricación digital regados por el mundo y que sean entregados a los hospitales. El apoyo a la iniciativa ha sido tal que van mas de 1900 personas trabajando remotamente en el desarrollo de elementos de distintas complejidades y que pueden unirse, aportar y empezar a colaborar en el foro de los CoronaVirusMakers:
Foro de Corona Virus Makers.
El trabajo ha sido intenso y han probado ya desde mascarillas de cara completa con policarbonato y PLA, sensores de oxígeno, mamparas, placas electrónicas, adaptación de motores, apps para gestionar camas, bombas, válvulas, etc. Diferentes equipos, distanciados pero poniendo corazón en lo que saben hacer: productos. Uno de los equipos, ReesistenciaTeam (@ReesistenciaT en TW) ya tiene en prototipo uno de los respiradores y ha empezado a hacer pruebas de estabilidad. Lo han logrado en tiempo récord, cerca de 96 horas, y podría ser de gran aporte para el resto de países, en el caso muy probable, de que el contagio no se pueda controlar y que las camas de hospital se queden cortas. Creo que debe ser el proceso de diseño colaborativo más grande y complejo que se ha desarrollado hasta el momento, ya que además de tener muchísima gente colaborando en tiempo real, hay la complejidad extrema de las limitaciones de reuniones en grupos de trabajo o en los mismos laboratorios. Tenemos los materiales a mano, pero no poderlos llevar. Volviendo a la analogía del cine, es como si estuviéramos rodeados de zombies invisibles que no nos dejan contactarnos con las comunidades vecinas, pero aún contamos con las líneas de comunicación abiertas; más abiertas que nunca.
Nos hemos puesto en contacto con AIRE y con el equipo de Reesistencia para tener su experiencia de primera mano, recomendaciones y traspasos de información en esta carrera por estar prevenidos en caso de que el COVID nos sobrepase. Apenas nos veamos virtualmente compartiremos la información. Mientras tanto voy a averiguar que podrá hacer, mi amiga, la doctora Tatiana sin tener que matar zombies en esta cuarentena.
Lucho.
Pd: Cuando publicamos esta noticia, los números de infectados en nuestra zona tenían estos números. Esperamos que con las acciones de estos equipos que vinculan el Diseño Industrial y el Covid-19 además de muchas otras disciplinas, las curvas de infección se mantengan bajas.