Hay momentos en los que Quito se llena de bullicio, como en cualquier otra gran ciudad del mundo. La prisa y la energía de ir de un lado a otro son constantes. Afortunadamente, existen cafeterías que nos sacan de esa rutina. Y con mucha fortuna para nosotros, tuvimos el encargo del diseño de una cafetería en Quito. Palatu está muy bien ubicada en la zona de negocios de la ciudad. Logramos convertirla en un oasis de aromas y sabores. Esto se logra gracias a Pablo Puente y su familia, quienes ofrecen uno de los mejores granos de café de Ecuador. Su enfoque en la calidad y la sostenibilidad ha hecho que esta cafetería se gane una reputación como el lugar preferido de los verdaderos conocedores del café.
Palatu no es solo una cafetería, es un lugar donde la música comparte el centro de atención con el café y los postres. Con un principal enfoque en el jazz y la electrónica, este espacio se ha convertido en un punto de encuentro para los amantes de estos ritmos. Las noches en vivo de jazz y los sets de DJ son la banda sonora perfecta para acompañar un café, un cóctel o un sándwich, creando un ambiente acogedor y estimulante.
Cuando diseñamos "Palatu, coffee spot", no imaginábamos que seríamos parte de una fusión del arte de hacer buen café con la expresión personal. El local se ha convertido en un punto de encuentro para artistas del tatuaje, donde se realizan fiestas temáticas y eventos. Hay días especiales en los que los amantes de la tinta en la piel pueden disfrutar de su café favorito mientras exploran las obras de talentosos artistas e inspirarse para plasmar su creatividad en su cuerpo.
